Cómo administrar el tiempo de tus vacaciones con los exámenes a la vuelta de la esquina

A todos nos gusta relajarnos, divertirnos, desconectar de la rutina… Y las vacaciones son el momento perfecto para hacerlo. Sin embargo, las vacaciones también son una oportunidad para aprender cosas nuevas, repasar lo que ya sabes y prepararte para los retos que te esperan, sobre todo si estás en la Universidad.  

En UNIE, sabemos que los exámenes no son lo más emocionante del mundo, pero tampoco tienen que ser un obstáculo para disfrutar de tu tiempo libre. Por eso, te ofrecemos algunas técnicas y prácticas que te ayudarán a estudiar de forma eficaz y entretenida, sin tener que renunciar a tus momentos de ocio y de descanso.

Estrategias para equilibrar estudio y descanso

Estudiar y descansar son dos actividades que a veces parecen incompatibles, sobre todo cuando aspiramos a sacar buenas notas. Pero no tienes que elegir entre una y otra, sino encontrar el equilibrio adecuado. No se trata de pasarse el día pegado a los libros, ni de dormir la siesta sin parar. Se trata de aprovechar el tiempo de forma inteligente, entretenida y eficaz.

Técnicas de gestión del tiempo para aprovechar al máximo tus vacaciones

• Planifica tus vacaciones. Antes de lanzarte a la aventura, haz un plan de lo que quieres hacer en tus días libres. Apunta en un calendario las fechas de tus exámenes, las actividades que te apetecen, los días que vas a estudiar y los que vas a dedicar a hacer otras actividades que te apetezcan. De esta forma, no solo aprovecharán más el tiempo, sino que tus tiempos de estudio y de trabajo serán más eficientes y productivos.
• Establece objetivos concretos. Intenta buscar metas específicas que puedas alcanzar con facilidad. Por ejemplo, en vez de ponerte “a estudiar matemáticas”, puedes decir “voy a repasar los temas 1 y 2 de matemáticas en dos horas”. De esta forma, sabrás exactamente qué tienes que hacer y  cómo lo vas a hacer.
• Aplica la técnica Pomodoro. Este método consiste en dividir tu tiempo de estudio en bloques de 25 minutos, separados por pausas de 5 minutos. Cada cuatro bloques, puedes tomar una pausa más larga de 15 o 20 minutos. Esta técnica te permite concentrarte mejor, evitar distracciones y mantener tu nivel de energía. 
• Disfruta de tus vacaciones. Por último, pero no menos importante, recuerda que tus vacaciones son para descansar, relajarte y divertirte. No te agobies por el estudio ni te sientas culpable por el ocio. Encuentra un equilibrio entre ambos y aprovecha al máximo tu tiempo. Haz cosas que te gusten, que te hagan feliz y que te llenen de energía. Así, volverás a la rutina con más ganas y más preparado para afrontar los exámenes.

Creando un horario de estudio efectivo en periodos vacacionales

Sé que puede ser tentador dejar el estudio para el último momento, pero créeme, eso solo te generará más estrés y ansiedad. Por eso, te recomiendo que intentes planificar tu tiempo teniendo claro las fechas y el tiempo que vas a emplear en cada tarea:

• Conoce tus fechas de exámenes. Lo primero que debes hacer es consultar el calendario académico y anotar las fechas de tus exámenes, así como los contenidos que se evaluarán. Esto te permitirá tener una visión global de lo que tienes que estudiar y cuánto tiempo te queda para hacerlo.
• Establece tus objetivos de aprendizaje. Una vez que sepas qué tienes que estudiar, el siguiente paso es definir tus objetivos de aprendizaje. Intenta estudiar el mismo contenido en varios días. El cerebro asimila mejor la información de poco en poco, que todo de golpe en un día.
• Elige el mejor momento para estudiar. No todos tenemos el mismo ritmo biológico ni el mismo nivel de energía a lo largo del día. Por eso, es importante que conozcas tus propios picos de rendimiento y que adaptes tu horario de estudio a ellos. Algunas personas son más productivas por la mañana, otras por la tarde y otras por la noche. Lo ideal es que estudies cuando te sientas más lúcido y concentrado.

Consejos para mantener la motivación y la concentración

Para estudiar bien, no solo necesitamos eficiencia y rapidez, sino también concentración y motivación. Sin embargo, el móvil, el ordenador y otras distracciones pueden desviarnos de nuestro objetivo y hacernos perder el tiempo, especialmente cuando estamos de vacaciones. Por eso, la concentración y motivación son esenciales, ya que nos impulsan a lograr las metas específicas que nos hemos propuesto en el estudio, y podemos aplicar una serie de consejos para lograrlas:

• Crea un ambiente adecuado. Estudia en un lugar tranquilo, cómodo, bien iluminado y ventilado, donde no haya distracciones ni ruidos que te desconcentren. Si puedes estudiar con luz natural, tus ojos y cerebro, lo agradecerán enormemente.
• Usa técnicas de estudio eficaces. No te limites a leer o memorizar el material, sino que trata de comprenderlo, relacionarlo, aplicarlo y sintetizarlo. Usa recursos como resúmenes, esquemas, mapas conceptuales, reglas mnemotécnicas, etc. que te ayuden a organizar y recordar la información.
• Repasa lo aprendido. No dejes que el olvido se lleve lo que has estudiado. Relee periódicamente lo que has estudiado, haciendo ejercicios, autoevaluaciones, simulacros de examen, etc. Así consolidarás tus conocimientos y aumentarás tu confianza y seguridad.

La importancia del descanso y el ocio en el aprendizaje

Aprender es una aventura que nos exige esfuerzo, dedicación y curiosidad. Pero no podemos estar siempre estudiando, también necesitamos momentos de pausa, de relax y de diversión. El descanso y el ocio son fundamentales para asimilar lo que aprendemos, ya que el cerebro los utiliza para repasar y reforzar la memoria. Además, el ocio nos ayuda a desarrollar otras facetas de nuestra personalidad, como la creatividad y la expresión.

Alimentación y ejercicio: pilares para un estudio eficiente

Una buena alimentación nos aporta los nutrientes y la energía necesarios para mantener la concentración, la memoria y el rendimiento cognitivo, mientras que hacer ejercicio regularmente nos ayuda a liberar el estrés, a mejorar el ánimo y a favorecer el sueño; cosas que son esenciales para consolidar lo aprendido.

Cómo una dieta balanceada y actividad física regular pueden mejorar tu capacidad de estudio

Nuestro cerebro y nuestro cuerpo necesitan una serie de nutrientes y vitaminas para funcionar correctamente, y esto es lo que nos aporta una dieta equilibrada. Algunos de estos nutrientes son las proteínas, que ayudan a formar y reparar las células; los carbohidratos, que nos dan energía y glucosa; o las grasas saludables, que protegen el sistema nervioso y las neuronas.

La actividad física regular es aquella que practicamos al menos tres veces por semana, durante 30 minutos o más, y que nos hace sudar y aumentar el ritmo cardíaco. Podemos caminar, correr, nadar, bailar, hacer yoga… El ejercicio físico tiene muchos beneficios para nuestro estudio, ya que mejora el flujo sanguíneo y el oxígeno al cerebro, lo que favorece la formación de nuevas conexiones neuronales y la plasticidad cerebral. Además, el ejercicio físico libera endorfinas, que son unas sustancias que nos hacen sentir bien, y más motivados a la hora de enfrentar nuestros estudios.

Técnicas de estudio intensivo para días de vacaciones

Tras planificar el estudio, hay que elegir cómo abordarlo. Hay gente que opta por estudiar todo el contenido en pocos días de forma intensa, y otras que lo reparten en muchos días y lo estudian poco a poco. Cada uno tiene que encontrar la técnica que mejor se adapte a su forma de estudiar y a su horario.

Métodos de estudio rápido y eficaz para maximizar el tiempo libre

• Lista de conceptos: Esta técnica es ideal para repasar lo que has aprendido de un texto. Solo tienes que escribir en columnas los conceptos e ideas más importantes que hayas encontrado y explicarlos brevemente. Así podrás revisar lo que te falta por entender y complementar tu estudio con otras notas.
• Cuadros comparativos: Si quieres ver las diferencias y semejanzas entre varios elementos, los cuadros comparativos son tu mejor aliado. Con esta técnica visual, podrás organizar los datos en columnas y filas, y establecer relaciones entre los elementos según los criterios que elijas.
• Flash Cards: Si te apetece memorizar más información de forma divertida, puedes probar las flash cards, unas tarjetas que te ayudarán a recordar los conceptos esenciales de una asignatura. Elige un tema, escribe una pregunta en una tarjeta y la respuesta en otra, usando palabras clave, imágenes o iconos. Luego, pon a prueba tu memoria con las tarjetas.
• Memorizar a través de imágenes: Las imágenes son una de las formas más poderosas de grabar contenidos en tu mente. Por eso, si quieres usar este método, llamado mnemotecnia, tienes que saber que consiste en crear una escena (puede ser una pequeña historia) donde aparezcan las imágenes y los conceptos clave. Así, podrás asociar y recordar mejor la información al visualizar esas imágenes.

Consejos para un retorno exitoso a la rutina de estudio

Como todos sabemos, el regreso a clases o al trabajo después de unas vacaciones puede ser duro. Sin embargo, desde UNIE Universidad, te queremos brindar un par de consejos para que este proceso sea lo más fácil y llevadero posible.

Preparándote mentalmente para la transición de vacaciones a exámenes

El irse a dormir tarde y no tener que madrugar es un lujo del que podemos acostumbrarnos demasiado en los periodos vacacionales. Por lo tanto, aproximadamente una semana antes de que empiecen las clases, es importante irse a la cama a una hora razonable y levantarse temprano.

Comprueba tu horario e intenta imaginar cuánto tiempo te va a llevar ir de clase a clase y como vas a ir (en metro, en autobús, en coche…) También, puede ayudarte a hacer una lista de todo lo que necesitas hacer la noche anterior. Esto te ahorrará mucho tiempo por la mañana, así que podrás dormir más e incluso desayunar sin estar agobiado. 

Lo más importante para afrontar este primer día de clases es la mentalidad que tengas. Piensa que es una oportunidad para reencontrarte con tus amigos y compañeros de clase, para hacer actividades productivas y para aprender cosas nuevas. Así que intenta verlo desde un lado más positivo, y todo te será mucho más llevadero